IMPACTO. El fuego sigue avanzando en la Chiquitanía. Pobladores del territorio Monte Verde se trasladaron a San Javier. Continúa el rescate de animales silvestres.
Cuatro comunidades del Territorio Monte Verde, alrededor de 300 personas, se vieron obligadas a salir hacia el centro urbano de San Javier huyendo del incendio y del humo que azota a esas comunidades chiquitanas, según Leoncio Chávez Salvatierra, cacique de Participación Ciudadana y Economía Indígena de la Central Indígena Paiconeka – San Javier.
“Las autoridades de allá poco caso están haciendo. Ahurita está un helicóptero para sofocar el incendio, pero están atendiendo el lado de (municipio de) Concepción, propiedades privadas. Ya son dos días que nos prometieron que iban a ingresar”, dijo Chávez.
De acuerdo a información entregada por el Centro de Estudios Jurídicos e Investigación Social (CEJIS), el siniestro está entre los municipios de San Javier y Concepción, en el Territorio Indígena Monte Verde. La zona es también región de producción ganadera.
El fuego está presente hace sesenta días en la zona. Las comunidades de Santa Ana, El Tajibo, Los Ángeles, La Esperanza y Santa María sufren el impacto directo desde hace dos semanas. Las clases ya se suspendieron por las malas condiciones del aire y la presencia de humo.
Chávez explicó que “la sequía ha comenzado en San Javier hace unos tres meses, eso ha hecho que el incendio avance más rápido”.
“Son varias comunidades que están saliendo a San Javier. Las comunidades solemos sacar agua de pauro (manantial) y ríos cercanos, pero la sequía ha hecho que se sequen”, indicó Leoncio Chávez.
El cacique agregó que algunas personas prefieren dejar las comunidades y trasladarse a San Javier, donde también se siente la falta del agua y “están racionando”.
14 kilómetros de fuego
Aseguró que los comunarios han sido rebasados por una línea de fuego de 14 kilómetros. “Ha habido ingreso con diferentes cuadrillas, (pero) no hemos podido controlar. Ahurita la alcaldía nos ha dejado solos como Central Indígena”, se lamentó Chávez.
La Central Indígena Paiconeka tiene un plan de chaqueo en vigencia que establece la prohibición de encender fuego para habilitar sus parcelas desde inicio de agosto. Sin embargo, dijeron que el fuego se originaría propiedades privadas. La dirigencia denunció que en las últimas horas el apoyo para mitigar el fuego se concentró en atender a las propiedades privadas y no así a las comunidades.
“Necesitamos ayuda de la Gobernación y del Gobierno nacional. Llegó la ayuda para el Comando Conjunto, pero se retiraron y hasta el momento no han respondido si van a enviar alimentación o medicamentos, no contamos con eso. Ellos están para apoyarnos, San Javier se declaró en desastre, pero solo una vez nos han traído ayuda”, explicó el cacique.
Animales silvestres afectados
El avance del fuego también está dejando una gran destrucción en la fauna y flora del departamento. El equipo de biodiversidad de la Gobernación, rescató a 11 neonatos lagartos caimán yacaré en el municipio de San Matías, los mismos que se encontraban en una poza que se estaba quedando sin agua; asimismo, se brindó atención veterinaria a una urina bebé.
En el trabajo de rastrillaje, “logramos identificar una poza de agua que a causa de la sequía y falta de lluvia se estaba secando. Ahí rescatamos a los 11 neonatos de lagartos caimán yacaré, con el propósito de brindarles un lugar seguro para ellos”, indicó Luis Miguel Carracedo, subgobernador de la provincia Ángel Sandoval.
Yaneth Castillo, veterinaria de la Gobernación, informó que la atención a estos individuos se realizó en la clínica móvil que se ha instalada en la subgobernación.
Los animales presentaban deshidratación y falta de alimentación, ahora están recibiendo atención. Además, recientemente se rescató un caimán yacaré adulto, que se encontraba deshidratado y afectado por los incendios.