ARTE. La exposición se inaugura esta noche en la Galería de Arte Manzana 1. La artista eslovena hace una crítica a una sociedad que encasilla a hombres y mujeres en determinados roles.
«Vida» es el nombre de la nueva exposición de Ejti Stih, la que se podrá apreciar a partir de este viernes en la planta alta de la Galería de Arte Manzana 1, y que refleja una crítica a una sociedad conservadora como la cruceña, que ha encasillado a hombres y mujeres en determinados roles, sin reconocer un contexto de profundas transformaciones y donde el mundo ya no se mueve sólo entre lo femenino y masculino, ni entre los extremos.
La exposición se inaugurará esta noche, a las 19.00, y mezcla diversos elementos para dar vida a una serie de obras en las que se combinan para reflejar lo que se percibe como propio de mujeres y hombres, estableciendo los roles que la sociedad les asigna.
La artista, en una entrevista con Desayuno Informado de Asuntos Centrales, explicó que esta muestra refleja dos principios, lo femenino y lo masculino, y lo que la sociedad espera de hombres y mujeres. «Los hombres deben ser poderosos, machos, invencibles, nunca deberían llorar, deberían ser como los ganaderos y las mujeres se supone que seamos frágiles, recatadas, delicadas y sumisas. He hecho estos dos principios: femenino y masculino, que luego, ellos y ellas, coronan su existencia en el matrimonio».
Agregó que «la sociedad cruceña es muy conservadora, sólo reconoce hombre y mujeres. También, según la Iglesia Católica, son solamente hombres y mujeres, no hay nada en el medio, no hay nada que se pueda desviar de este concepto y la sociedad funciona en este sentido, lo que se refleja en la celebración del matrimonio».
Por ello, en «Vida» se incorporan diversos elementos relacionados con las bodas. En una de las salas, la atención se centra en una torta gigante -con crema y huesos- desde la que sale un velo de novia que elaboró a partir de varios tapetes de encaje elaborados por la madre de una amiga eslovena. «Cada encaje es una obra de arte y los he juntado en este gran velo, que -por mi maldad- acaba en trapos de piso y secadores. La vida es como un encaje, empieza con esta ilusión frágil de los encajes, pero al final todos acabamos trapeando».
Además, en cada una de las obras se reflejan situaciones del día a día de las parejas, como esos detalles cotidianos de cómo se tapa o no la pasta dental o cómo se acomodan los cepillos de dientes.
Ejti no pudo precisar cuántas obras incluye esta exposición, pero sí relató que fue la que más tiempo le demandó para su elaboración. Incluye una serie de elementos distintivos, que la artista obtuvo de maneras muy diversas y a lo largo de los años. Por ejemplo, las calaveras de vacas y toros que coronan los cuadros y que ella recogió hace unos años durante un viaje por Chaco cruceño junto a su esposo. Explicó que debido a que los animales se ponen a la sombra de un árbol y muchas veces mueren como consecuencia de la sequía, los esqueletos quedan sobre la tierra seca y se preservan.
En esa ocasión, llenó el vehículo pensando que en algún momento podría usar las osamentas. Hoy son parte de los cuadros, instalados como escudos sobre marcos antiguos y «resguardando» las imágenes de ganaderos en diferentes momentos. Ejti explicó que buscó darles ese toque de imágenes de la antigüedad, instalando las calaveras «como un signo de poder» y como ya estaban los ganaderos, añadió a sus princesas.
Stih dijo que con sus diferentes trabajos no busca escribir manifiestos ni dar opiniones exactas sobre diferentes temas. «Uno tiene opinión sobre lo que lo rodea, pero yo no critico, solo busco retratar lo que veo. No critico ni pienso cambiar nada, solo quiero decir que el amor cuenta más que el matrimonio”, sentenció.
Una trayectoria ligada a Bolivia
La artista eslovena vive en Bolivia desde hace 42 años y aunque es su faceta de pintora la que más se conoce, ha incursionado en diferentes áreas como escultura, cerámica y grabado; ha realizado ilustraciones para libros, afiches, revistas y una infinidad de publicaciones, además de diseñar vestuario y escenografía para más de 50 obras de teatro en Bolivia, Eslovenia y España; y también ha incursionado en la docencia, dictando clases de dibujo, pintura y artes visuales.
Ha presentado 170 exposiciones individuales y ha participado en numerosas bienales y exposiciones colectivas. Actualmente es cofundadora y directora de la Manzana 1, el espacio de arte que se ha convertido en un referente de la cultura y ha permitido que miles de personas cada año puedan acceder a diferentes expresiones artísticas.
Ejti explicó que «vamos navegando» al referirse a los esfuerzos que se realizan para mantener en funcionamiento la galería de arte, que es visitada por 17.000 personas cada mes. Funciona de lunes a domingo, incluidos los feriados, en los siguientes horarios: de 10.00 a 13.00 y de 15.00 a 20.00.