ELEGIDOS. El primer lugar lo obtuvieron Christian Albarado, Pavel Campero y María José Campos.
Christian Albarado, Pavel Campero y María José Campos resultaron ganadores del “Concurso de Ideas para Desarrollar un Plan Maestro y Directrices de Anteproyecto para el Bioparque Municipal de Fauna Sudamericana”, organizado por el Gobierno Autónomo Municipal de Santa Cruz de la Sierra, el Colegio de Arquitectos de Santa Cruz y el Colegio de Arquitectos de Bolivia.
El segundo lugar lo ocupó el grupo de Joanne Norma Gil, Karla Jennifer Iporre, Claudia Katherine Rojas, Jimmy César Toledo, Marcia Gabriela Tavera y Sandra Leonor Quiroga. Mientras que en el tercer puesto quedaron Juan Alejo Vedia, Paola Miranda, Nicol Aguilar, Darla Cuba, Alberto Fernández, Jesús Morejón, Florencia Portillo, Nayeli Blanca Copo y Paola León. Hubo una mención honrosa para Danilo Patriota, Yuleska Yamile Ziade, Henz Arno Drawert y Olga Pérez Justiniano
El anuncio se realizó en el Colegio de Arquitectos de Santa Cruz. Carlos Alberto Morales, presidente de la institución, ponderó los proyectos presentados. “Todos son diferentes, pero en todos se destaca la calidad, innovación y el respeto al medio ambiente”, expresó. Además, el titular del ente colegiado indicó que esta contienda sólo fue el inicio de un proyecto más grande.
15 propuestas
Por su parte, Daniel Osinaga, director del concurso, hizo un recuento de cómo fue el proceso. “Se inscribieron 39 equipos conformados por arquitectos y profesionales especialistas en biología, veterinaria, etc. Al final, fueron 15 las propuestas recibidas”, dijo.
La secretaria municipal de Planificación para el Desarrollo, Mariana Daga, indicó que el bioparque “no sólo nos permitirá reimaginar el actual Zoológico Sudamericano Municipal, sino que también ha sido una plataforma para que arquitectos, especialistas y visionarios presenten sus propuestas que enriquecerán este proyecto clave para el desarrollo sostenible de nuestra ciudad”.
Por último, Christian Albarado, se refirió a su trabajo ganador: “Nuestro proyecto consideró la parte ecológica y la restitución de la naturaleza con las consideraciones del ingeniero forestal que trabajó con nosotros. Consideramos una arquitectura prácticamente transparente, a la altura del observador; no es invasiva y más bien se complementa con el paisaje”.