ECOSISTEMA. Mirar a mercados grandes, elegir al inversor adecuado, desarrollar una estrategia de crecimiento e incorporar la sostenibilidad, son algunas de las claves para crecer.
Las startups bolivianas tienen grandes oportunidades, pero también grandes desafíos. Incorporar una mirada regional desde su concepción, expandir la propuesta de productos y servicios a nuevos sectores, escalar aplicando las buenas experiencias de otros ecosistemas, actuar de manera colaborativa y tener claro sus objetivos a la hora de levantar capitales, son algunos de los factores clave. Además, se requieren políticas públicas que impulsen su desarrollo.
Estas y otras pautas, surgieron en el Venture Capital & Impact Investment Summit Latam (VCILAT) 2024, que durante tres días reunió a emprendedores, inversionistas, organismos internacionales, empresarios y otros actores del ecosistema emprendedor, en un espacio para el diálogo, la colaboración y la innovación.
El encuentro fue organizado por Santa Cruz Innova, la Agencia de Innovación de la Cámara de Industria, Comercio, Servicios y Turismo de Santa Cruz -Cainco, concluyó con gran éxito, consolidándose una vez más como el evento clave para el ecosistema emprendedor de América Latina.
Lo dijo el presidente de Cainco, Jean Pierre Antelo, en la apertura. «Este evento no sólo es una plataforma para compartir conocimientos, sino también para construir las alianzas necesarias que impulsarán el crecimiento económico de nuestra región».
Hoy el Venture Capital tiene una capacidad transformadora. Antelo aseguró que los emprendedores son agentes de ese cambio y, más allá de los negocios, impactan vidas. Por ello, durante esta versión del VCILAT, se hizo énfasis en las startups de impacto, que hoy encuentran oportunidades en áreas como la movilidad sostenible, la lucha contra el cambio climático, la agricultura, la educación y la salud, entre otras.
La mirada de los financiadores
Hay fondos para la innovación en la región. Sin embargo, sólo el 19% del Venture Capital (VC), llega a otros países que no sean Brasil, México y Colombia. Eso abre una oportunidad para Bolivia, que está bajo la mirada de 15 VC, con una disponibilidad aproximada de 50 millones de dólares.
Magdalena Coronel, jefe de Inversiones del BID Lab, planteó algunos desafíos para que las startups locales sean más atractivas. Lo primero, nacer con una mirada regional, ofrecer servicios y productos a poblaciones desatendidas, adoptar las mejores prácticas globales para tener escalabilidad, y colaborar con founders experimentados y VCs regionales, para aprovechar la transferencia de conocimientos.
Sus propuestas fueron corroboradas en los diferentes paneles. Son numerosas las startups bolivianas que han apostado como segundo destino por Paraguay. El consejo de los expertos, fue claro: ese país también debe ser asumido como un testeo, pero el verdadero objetivo debe estar en los mercados de Colombia o México, donde ya están operando algunas, como tuGerente.
El VCILAT 2024 también fue un espacio para conocer la propuesta y el avance de numerosas startups bolivianas. El Mapeo TIC Bolivia registró 167 emprendimientos de base tecnológica, de las cuales, el 32% son Fintech. Hoy el desafío es desarrollar complementariedad y acciones para atraer financiamiento.
Lecciones y oportunidades globales
Bolivia forma parte de América Latina, una “tierra de oportunidades” para los emprendimientos, aún en tiempos complejos. Esa es la convicción de Mariano Mayer, managing partner de Newtopia, quien compartió su experiencia en la charla “Navegando la Crisis: Emprendimiento en Contextos Complejos de América Latina”.
En un ecosistema en desarrollo como el boliviano, se requiere talento emprendedor, pero también un marco regulatorio adecuado, expresó Mayer. Reiteró la necesidad de “pensar en grande” a la hora de mirar merados y tener claro el rol de los inversores.
En ese sentido, el Corporate Venture Capital (CVC) es una oportunidad y permite conectar a los emprendedores con la empresa tradicional, con énfasis en la adopción de tecnología en el “core” del negocio. Estas nuevas oportunidades de financiamiento tienen fortalezas adicionales, como el compartir conocimientos y poder establecer relaciones de largo plazo.
Lo ratificó Sergio Escobar, managing partner de BCF Ventures, al reflejar el papel crucial que desempeñan estos fondos en el financiamiento y crecimiento de startups en la región.
“Es importante definir para qué tener un inversor y la apuesta debería ser por uno que aporte y acompañe”, dijo Eduardo Pelaez, líder de Krealo, el CVC de Credicorp en Perú.
La urgencia de la visión global
Una línea que ratificó Salvador Said, managing partner de 30N Ventures de Chile, en su charla “Visión Global e Internacionalización para Startups”. Explicó que la elección de un inversor, implica elegir un socio y debe pasar por la definición de una estrategia de crecimiento.
Entre los principales consejos para traspasar fronteras, Said reiteró que los mercados pequeños son para testear, hay que arriesgarse e ir por los grandes; es fundamental conocer la cultura del nuevo destino; y buscar inversionistas que abran puertas.
“No es levantar capital por levantar capital, o crecer por crecer. Hay que ofrecer buenas soluciones, que faciliten la vida”, afirmó.
La necesidad de políticas públicas
¿Cuál debe ser el rol del Estado en el ecosistema emprendedor? Esa fue una de las interrogantes que surgieron en el VCILAT 2024. Y la respuesta es que se necesita su participación, como uno de los principales actores, y entendiendo que es el responsable de generar políticas públicas, las que deben brindar seguridad jurídica e incentivos, entre otros elementos.
La experiencia de países vecinos, como Perú, demuestra que los fondos estatales que se destinan a los emprendimientos, pronto retornan a través de impuestos y la dinamización de diferentes sectores económicos, como explicó Juan Carlos Crespo, subgerente de Desarrollo e Innovación de Cofide.
Ariel Zabala, gerente general del Banco de Desarrollo Productivo (BDP), anunció la creación de un fondo de capital de riesgo para financiar a startups locales.
Por su parte, Antonio Riveros, coordinador general de Startup Bolivia, insistió en la necesidad de generar una articulación y recordó que hay diversos proyectos de leyes relacionadas con el emprendedurismo, pero que no logran avanzar en la Asamblea Legislativa. “No queremos regalos, sino que rayen la cancha e incentiven”, afirmó Riveros.
Bolivia en la región
Carlos Jordán, CEO y cofundador de Ultra, destacó las particularidades y desafíos únicos que enfrentan los emprendedores bolivianos en su camino hacia el éxito. Los ejemplos son varios. tuGerente, Mobi Latam, Sommos y Envíos Pet narraron sus experiencias en el proceso de expansión hacia mercados como México, Perú y Paraguay.
El desarrollo sostenible se ha instalado también en el ecosistema emprendedor. Hoy los objetivos de sostenibilidad son parte de las evaluaciones y las startup deben sumar impacto positivo en temas ambientales o sociales. Esto quedó en evidencia durante la presentación de Navil Agramon, director de Mecanismos Financieros de Fundesnap, centrada en “Inversiones de Impacto y Capital de Riesgo en Espacios de Conservación y Desarrollo Sostenible”.
IA y la diversidad
La incorporación de la inteligencia artificial y la inclusión de diferentes grupos, además de promover la participación de la mujer en la creación de los emprendimientos y en cada una de sus fases de desarrollo, son otros desafíos que debe enfrentar el ecosistema emprendedor boliviano.
A través de diferentes paneles se destacó el impacto positivo que estos elementos pueden tener, especialmente en la conformación de equipos diversos y resilientes, lo que -está probado- incide en mejores resultados.
En cuanto a la IA, ésta debe tener una razón de ser en los diferentes emprendimientos. El consejo de los inversionistas fue “no incluirla sólo porque está de moda”.
«Este evento ha sentado las bases para un futuro más innovador y próspero en América Latina», aseveró Julio Silva, gerente de Cooperación y Sostenibilidad de Cainco, al cerrar el VCILAT 2024.
De esta forma, concluyeron tres jornadas de aprendizaje, generación de alianzas y oportunidades de negocios, que permitieron fortalecer el ecosistema de capital de riesgo e inversión de impacto en la región, con alianzas y discusiones que prometen transformar el futuro del emprendimiento en América Latina.