BARRERAS. Los estereotipos frenan el acceso a sectores tradicionalmente masculinos, mientras aumenta la brecha salarial entre hombres y mujeres.
«Me dicen que es muy peligroso para mí, que soy muy delgada, que soy pequeña, que no tengo la fuerza… Al buscar empleo se me cierran muchas puertas», comenta Cintia Quispe, quien gracias al programa Ferro Mujer, logró emplearse en Ferroviaria Andina como mecánica industrial, convirtiéndose en la primera mujer en su área.
Ella es un ejemplo de que la equidad de género en el mundo laboral sigue siendo un desafío en Bolivia, aunque las mujeres representan una parte fundamental de la fuerza productiva del país, aún enfrentan barreras para acceder a empleos en sectores estratégicos y alcanzar posiciones de liderazgo.
Los estereotipos, la falta de acceso a puestos de trabajo en la industria manufacturera, las dificultades para acceder a puestos de liderazgo y una brecha salarial que va creciendo entre hombres y mujeres, son algunos de los aspectos que reflejan los retos para avanzar hacia la equidad.
En el marco del Proyecto Vida Digna Sin Violencia, que cuenta con el apoyo de la Embajada de Suecia en Bolivia, la Cámara Nacional de Industrias (CNI) y Solidar Suiza Bolivia han establecido una alianza para impulsar acciones concretas que promuevan la inclusión, la prevención de violencia y el liderazgo femenino en el sector industrial y empresarial.
Una alianza con acciones concretas
En el marco del convenio suscrito el pasado 28 de febrero, se están poniendo en marcha campañas de sensibilización y llamados a la acción para visibilizar el aporte de las mujeres en distintos ámbitos, entre ellos la industria, destacando el ejemplo de aquellas que están logrando abrirse camino en sectores históricamente dominados por hombres, y visibilizando la agenda pendiente en materia de equidad de género.
La CNI implementa programas de formación y mentoría para mujeres en sectores estratégicos, fomenta políticas de igualdad salarial y acceso equitativo a oportunidades laborales, y visibiliza el liderazgo de las mujeres en la industria, rompiendo estereotipos de género.
La sinergia con Solidar Suiza Bolivia impulsará estas y otras acciones. «Una economía más equitativa e inclusiva es posible si las empresas asumen un rol activo en la reducción de brechas de género. Esta alianza es un paso importante para impulsar el cambio», destacó Martín Pérez, coordinador de Solidar Suiza Bolivia.
El sector industrial y empresarial tiene en sus manos la oportunidad de ser un motor de cambio que aporta a una vida digna sin violencia para las mujeres.
El convenio tiene el objetivo de impulsar acciones estratégicas en tres áreas clave: información y sensibilización a través de campañas, equidad de género y desarrollo empresarial. Ambas instituciones realizarán acciones para fortalecer la participación de las mujeres en la industria y promover iniciativas que generen un impacto positivo en el sector, integrando en las empresas, el enfoque de género y la prevención de la violencia.