PRIORIDADES. Siete son los ejes que se han priorizado en un proceso de análisis y acción que impulsa el Cedure. La premisa es avanzar hacia una ciudad que brinde calidad de vida.
«Santa Cruz, ¿cómo vamos?». Esa es la pregunta que desafía a ejercer una ciudadanía plena y participar en la definición de una ciudad que brinde calidad de vida a sus habitantes y los integre, ofreciendo las mismas condiciones básicas para su desarrollo, más allá de la zona en la cual se encuentren, integrando elementos como la sostenibilidad, la productividad, la inclusión, el bienestar y el medio ambiente, en el centro de su planificación.
Además, es una invitación a identificar las prioridades y avanzar, desde la planificación técnica, a una ciudad que sea ambientalmente sostenible; que cuente con servicios eficientes en áreas como transporte, señalización, mercados, drenaje pluvial y gestión integral de residuos, entre otros; que impulse una economía productiva, competitiva e integrada; que sea segura y brinde acceso a la salud, además de promover estilos de vida saludable y espacios para preservar el bienestar; que fomente la cultura ciudadana y sea inclusiva; y donde prime un modelo de gestión pública transparente y que priorice al ciudadano.
La iniciativa nació en el Centro de Estudios para el Desarrollo Urbano y Regional (Cedure) hace unas semanas y se traduce en un Programa de Seguimiento y Monitoreo de Planes Urbanos, cuyo objetivo es que la sociedad civil haga seguimiento a las acciones, los proyectos y las inversiones que hace el sector público, pero desde el inicio.
«Esto significa saber qué planes hay para la ciudad, en qué etapa están, cómo están marchando. La gran falencia de la sociedad civil para hacer para ejercer su derecho a controlar es que no tiene la información y esa información no tiene continuidad. Las cosas suceden y los temas desaparecen y después de dos tres años se vuelve a hablar del tema y nadie sabe en qué se quedó», expresó el director del Cedure, el arquitecto Fernando Prado.
“Santa Cruz, ¿cómo vamos?” busca retomar un proceso que arrancó hace unos diez años, en simultáneo con otras ciudades de la región, pero que no tuvo continuidad por la falta de recursos. “Lo que buscamos es generar una acción desde la sociedad civil organizada, enfocada en el desarrollo urbano y que pueda rescatar el camino recorrido, sistematizar el aprendizaje acumulado y hacer seguimiento a los temas estratégicos. No podemos partir cada vez de 0”, explicó.
Más de 70 personas llegaron a la primera convocatoria el pasado miércoles, en Unifranz. Y seguramente se sumarán otras para apoyar en cada una de las comisiones que se conformaron.
“He visto una cantidad enorme de gente muy interesada en estos temas, que ha venido como un ciudadano; en segundo lugar, me han impactado las diferencias generacionales, eso es muy enriquecedor. Hay un interés de los ciudadanos para que las cosas se hagan bien”, dijo Prado.
«El objetivo mayor es mejorar la calidad de vida de la gente, que Santa Cruz sea una ciudad en la que se vive mejor y en la que existan menos diferencias. Hay que darle solidez a esa visión. En el debate ha surgido mucha información sobre proyectos y recursos que existen para Santa Cruz de la Sierra, pero hay que conocerlos», expresó Prado.
Tras un trabajo por comisiones, se identificaron una serie de planes o programas que están en marcha, otros que se han quedado en etapa de diseño, y a los que es necesario dar seguimiento, por ejemplo, los planes de arborización, los fracasados planes de reordenamiento del transporte urbano, el futuro del zoológico, la protección de los acuíferos, la recuperación del centro histórico o la aplicación de la nueva Ley de Cultura del municipio, entre otros.
Cada grupo continuará trabajando y el objetivo en los próximos dos meses es tener identificados los planes que existen y en qué etapa están. También se definió hacer un relevamiento de información en determinadas áreas, donde los avances son impulsados por organizaciones de la sociedad civil, como es el caso de formación ciudadana.
«Lo importante es generar una acción que se mantenga en el tiempo. Debemos buscar una ciudad que recupere y mantenga la calidez de los cruceños, donde vivamos de manera complementaria y mostremos que lo mejor de esta ciudad es su gente. Uno de los desafíos es tomar conciencia de que somos muchos, somos diversos y de que Santa Cruz no solamente es Equipetrol. Las construcciones de edificios son una muestra de que al capital inmobiliario le ha ido muy bien y que tiene mucho dinero, pero eso no es toda Santa Cruz. Debemos lograr una visión integral de la ciudad y que la actividad inmobiliaria no sea la que marque el desarrollo”, afirmó Prado.
Las diferencias se resienten en temas como salud, educación o seguridad, como quedó en evidencia durante el análisis. «Por ello, debemos trabajar por una Santa Cruz que dé igualdad de oportunidades de partida a la gente, para que no haya niños desnutridos, que todos puedan ir a un buen colegio, que tengan asistencia sanitaria en el momento en que lo necesiten o que una mamá tenga una guardería para dejar a sus niños y poder ir a trabajar. Esas son las cosas de las que tenemos que preocuparnos ahora, ya no solamente de las avenidas y del pavimento, sino de lo que la gente realmente necesita en su vida cotidiana», precisó el director del Cedure.